martes, 4 de febrero de 2014

Best man down

Subes al coche, pones la llave en el contacto, giras y apretas el acelerador..., oyes el run-run pero no arranca... y vuelves a giras la llave y run-run pero no arranca..., y giras y giras ..., y por fin, el coche se pone en marcha y el ruido del motor suena perfecto. Porque empieza muy bien, por momentos dispares se pone interesante pero sin acabar de cogerse, sin requerir tu interés más que un breve espacio de tiempo; no define ni perfila su atractivo del todo, va jugando con tu atención sin acabar de atraparla del todo para, conforme se acerca el final, redondear dicho intento y salir satisfecho de lo visto, acomodado por la dulzura de la resolución. No llega a ser una gran comedia, escasamente te reirás; no es un lacrimógeno drama pues no vas a llorar. Juega en ambos terrenos sin concretar ni terminar de explorar todas sus posibilidades. El resultado es un trabajo ameno, digestible y de sencillo, amable visionado que agrada, gusta en conjunto pero que sólo aspira a un aprobado teniendo material para mucho más. Pero te vale, te conformas; te ha gustado, que es lo importante. Producción suave, de recorrido lineal que no profundiza en todas sus posibilidades; sólo lo suficiente para poner el cohe en marcha y tener un viaje tranquilo.





No hay comentarios: